Híbrido eléctrico HEV: todo lo que necesitas saber
Puede resultar complicado decidirse por una u otra tecnología híbrida, por lo que en esta sección te vamos a aclarar un poco más qué es eso a lo que denominan ‘coche híbrido eléctrico’. El Ford Mondeo HEV es el ejemplo perfecto para explicarlo y puede que ¡hasta el vehículo que estás buscando!
Es el momento de cambiar de coche y todavía no te aclaras con PHEV, MHEV y HEV. Te lías con tanto término extraño y quieres saber si, tal vez, un híbrido eléctrico (HEV) es lo que se ajusta a tus necesidades. Tranquilo, porque te entendemos perfectamente y estamos aquí para ponértelo fácil.
HEV o híbrido eléctrico, ¿qué es?
Lo primero que hay que saber es que todos los vehículos de esta categoría tienen en común la presencia de un motor de combustión principal. Este recibe el apoyo de un propulsor eléctrico que también es capaz de impulsar el coche por su cuenta, pero solo a baja velocidad y en distancias cortas. Efectivamente, es algo intermedio entre la tecnología híbrida enchufable o PHEV y la que conocemos como mild hybrid o MHEV.
Frente a estos últimos, los coches con sistema de propulsión HEV cuentan con una batería algo más capaz y con un bloque eléctrico de potencia mayor. Y si los comparamos con los híbridos enchufables, lo más interesante es que puedes olvidarte de conectarlos a la red eléctrica. La batería se recarga automáticamente mediante la mecánica de combustión y también gracias a una evolucionada tecnología de frenada regenerativa.
